jueves, 18 de marzo de 2010

Lost: Recon




Me encanta cuando en Lost, cuando quedan 15 segundos para que termine el capítulo, hacen un primer plano de uno de los personajes, ponen la orquesta a toda pastilla, dice una frase aleatoria y acto seguido aparece el asesino letrero de LOST. Hay casos en los que te quedas con el culo torcío durante días. Otras veces, es tan ridículo que lo único que puedes hacer es reírte. ¿ A alguien le importa realmente que SAWYER y KATE se escapen en submarino o en pedaleta de domingo playero?

Ay Ab Aeterno, ven a salvarnos de esta mediocridad.



miércoles, 10 de marzo de 2010

Lost: Dr. Linus




Lo único que me ha gustado de este capítulo es que me ha llevado a reafirmarme en la cuestión que más me enigma de la serie:

¿ Cuánto tiempo lleva sin dormir esta gente?




jueves, 4 de marzo de 2010

Off-topic



Tú sí que eres Ciencia Ficción de la buena.

miércoles, 3 de marzo de 2010

Lost, al anochecer



Teoría fácil, infantil y grosera en camino.

Creo que toda esta trifulca entre Jacob y Flocke viene de que Flocke una vez se tiró un eructo y entonces Jacob dijo: "Bocio permante, el que me dé chupa veinte". Flocke se enfadó muchísimo, se convirtió en un gran pedo oscuro y le dijo: ¡Ya no t'ajunto! Todos estos años, Flocke ha intentado darle el collejón correspondiente a Jacob, y cómo no podía por sí mismo desarrolló un poderoso sistema basado en una tiza y un trozo de piedra, para contactar con amiguitos que le dieran la colleja por él a Jacob. Con el paso del tiempo, una cosa llevó a la otra, "tú qué miras", "la nariz que se te estira", "tú no entras en mi templo, que no me gusta que se fume", "tú maltratas a Rita", "tú eres un necrófilo..." Vamos, que las acusaciones fueron subiendo de tono hasta que acabó en lo que acabó. Ahora Flocke quiere cargarse a los amiguitos de Jacob para poder formar una familia feliz en la que jugar a Bocio.

Fin

pd- La isla en realidad es un prototipo de Hasbro.

martes, 2 de marzo de 2010

Posesión Infernal, Sam Raimi



Es cierto eso que dicen de que es más fácil escribir criticando algo que no te gusta, que alabando lo que te gusta.
Me encanta cuando caen clásicos de mi cine en las manos carcomidas de quien escribe.

lunes, 1 de marzo de 2010

The Crazies, otra vez jodiéndome la vida




¿Por qué hay una larga, inmensa, infinita lista de películas, series de televisión, novelas, teatros, y demás ficciones varias, que parten de una premisa increíble y terminan por destrozarla hasta dejarla irreconocible?

Me ha pasado con The Crazies ( tercera película de George A.Romero, 1973, traducida de manera increíblemente inspiradora como Los Crazies en este, nuestro país). Decía, que me excedo en las explicaciones al márgen, que me ha pasado con The Crazies como me pasó con The Happening en su día. ( Ni siquiera Zooey consiguió que mermaran mis ganas de seguir el ejemplo de los infectados de la película)

La idea de virus misteriosos que transforman a los humanos y les obligan a realizar atrocidades es algo que me encanta. No ya en el fenómeno zombie ( 28 días después, REC, Infectados) sino en este peculiar escenario en el que la gente no vomita cosas chungas ni tiene los ojos inyectados en sangre. Simplemente se han vuelto locos.

El problema de The Crazies radica en tres aspectos vitales para un film de zombies ( acabo de contradecir mi párrafo anterior, pero es que hablar de Romero y no utilizar el término zombie me parece desaprovechar una oportunidad de oro:


1. En un film de zombies no puedes basar absolutamente toda la película en la introducción al conflicto. Bueno, qué coño, esto no se hace en ninguna película. Es horrible ver una película de terror y pensar: qué soberano coñazo.


2. Si quieres que tu película sea recordada como una buena película de terror introduce: buenos actores, diálogos trabajados, escenas inquietantes y trabaja en la construcción de los personajes y en la creación de ambiente. Si quieres que tu película sea recordada como "de culto", y más allá, de serie b, introduce actores pésimos, diálogos imposibles, situaciones grotescas y mezcla perfecta entre terror genuino y humor. Si quieres que tu película sea recordada como un truño introduce: actores mediocres, diálogos manidos, situaciones predecibles y una mezcla horrible entre thriller de sobremesa y alguna variante barata de CSI.


3. Pero lo más importante, para que una película de zombies, y más aún, de George A. Romero pueda gustarte sólo se necesita una cosa. Esto:




Me da igual que sean altos, bajos, feos, guapos, sanguinolientes, putrefactos, serios, tarados, infectados, poseídos o simplemente furiosos. Sólo pido que aparezca alguno.



Por cierto, esta semana se ha estrenado en los USA, el remake de la susodicha, que si bien parece que va a ser bastante mala, tiene bastantes puntos para mejorar su referente.


Buenas noches.