Esta temporada televisiva nos hemos encontrado con un estreno muy extraño. Se trata de Dollhouse, la nueva serie de Joss Whedon. Quizá el nombre no te suene (¿de verdad?), pero si digo Buffy Cazavampiros, Angel, Firefly o la divertidísima Dr Horrible's Sing Along Blog, seguro que entonces sabes a quién me refiero. Considerado un maestro por unos, y un vulgar por otros, es cierto que Whedon cuenta con una marea de fans capaces de seguirle hasta las puertas del infierno. Si a esto añadimos que llevaba un tiempo lejos de la televisión, y que el argumento de la nueva serie pintaba algo estupendio,la primera pregunta que habría que hacerle a Dollhouse es: ¿ ha cumplido las expectativas de los fans? La respuesta es un rotundo no, pero el resultado no es tan negativo como algunos han escrito por ahí.
Por Javier Roiz para SerieZeta en CeroPretensiones
Por Javier Roiz para SerieZeta en CeroPretensiones
Antes que nada, don Javier, ¿de qué va Dollhouse? Pues si me invitas a una caña te lo cuento largo y tendido. ¿Qué no me invitas? Vale. Dollhouse trata sobre una organización clandestina que ha borrado las mentes de algunos humanos ( de manera voluntaria) para convertirles en esclavos que actúan bajo el deseo de quienes los contrata ( yuppies ociosos),
Dollhouse ha sufrido mucho. Para empezar se estrenó en la midseason, que si bien no es especialmente relevante, es cierto que los estrenos de febrero son menos sonados que los de septiembre ( excepto aquellas series ya asentadas en la audiencia, ejem Lost). Luego sufrió el acoso del que probablemente haya hundido a la serie: el canal Fox. Cuando Joss Whedon acudió a Fox con su magnífico piloto ( que podéis encontrar en la red como 1x00 Unaired Pilot- Echo), los responsables de la cadena le dijeron que aquello no servía. Que con el espléndido estreno de The Mentalist y de su niña mimada del año, Fringe, lo que molaba era unos procedimentales de los de toda la vida. Whedon se opuso, y llegaron a un acuerdo de cinco capítulos de estructura procedimental ( es decir, tramas autoconclusivas al estilo CSI).
Así pues, los cinco primeros capítulos de Dollhouse corresponden a esos procedimentales exigidos por la cadena. Y son estos cinco primeros capítulos los que hundieron a Dollhouse en audiencias bochornosas. Los fans acudieron a las puertas de Fox e indignados levantaron un dedo al cielo: "¡Que nos devuelvan el dinero!" Segundos más tarde (los fans todavía dedo al cielo) Fox les contestó que no habían pagado nada por verlo. Bromas aparte ( evidentemente, el suceso antes descrito jamás sucedió), sí es cierto que en los foros sobre series se hablaba de decepción absoluta. Pero en las distintas convenciones (Comic-cons) que se organizan cada dos por tres en los Estados Unidos de América, Whedon y Dushku ( protagonista absoluta de la serie y productora ejecutiva) anunciaban a los fans: "Esperaos al capítulo 6, que va a ser acojonante". Me recuerda mucho a lo que sucedió con Fringe ( de la que hablaremos más adelante). Y el capítulo 6 llegó, y evidentemente todo cambió. Se fueron dejando a un lado los rollos procedimentales y Dollhouse ahundó en su propia mitología, hasta llegar al clímax final.
Bien, todo esto es la teoría. Si me preguntáis por mi opinión os diré, pequeños saltamontes, que ni los cinco primeros episodios son tan horribles, ni el resto de la serie es tan buena. Todo en general está un poco forzado. Whedon, que en Buffy Cazavampiros tejía unos guiones autoparódicos bastante hilarantes, se pone aquí serio y no podemos terminar de creerle. Las actuaciones ( en plena época dorada de la ficción televisiva) no dan la talla, y algunas frases me hicieron darle a la barra espaciadora para parar un segundo y tomar el aire ( "Nadie debería ser esclavo de nadie. Sobre todo ahora, que tenemos un presidente negro" WTF?). Otro problema que tiene Dollhouse son sus personajes. Sabemos que Whedon y Eliza Dushku se llevan muy bien, y que ella ha invertido dinero en el producto, pero ¿tiene que ser el personaje de Echo una muestra continua de las aptitudes de Dushku? Su presencia en pantalla es excesiva ( vale, sí, es la protagonista, pero hay momentos de sobreexposición descarada). Además hay un problema más importante con respecto a los personajes. La propia temática de la serie ( recordemos, personas a las que se les ha borrado la mente para implantarles nuevas personalidades) hace que en cada capítulo conozcamos a personajes nuevos dentro de la piel de los mismos actores, con lo que resulta realmente difícil empatizar con ellos. Si bien es cierto, que Echo es lo suficientemente atractiva ( y no sólo físicamente) como para conectar con ella. Dejaremos al márgen las cuestiones morales que plantea la serie y las posibles segundas lecturas que pueda llevar el discurso ideológico de la serie ( ¿podemos relacionarlo con las células madre?), porque sí entramos en estas cuestiones no sé qué concepción tendría de la serie.
Así pues, los cinco primeros capítulos de Dollhouse corresponden a esos procedimentales exigidos por la cadena. Y son estos cinco primeros capítulos los que hundieron a Dollhouse en audiencias bochornosas. Los fans acudieron a las puertas de Fox e indignados levantaron un dedo al cielo: "¡Que nos devuelvan el dinero!" Segundos más tarde (los fans todavía dedo al cielo) Fox les contestó que no habían pagado nada por verlo. Bromas aparte ( evidentemente, el suceso antes descrito jamás sucedió), sí es cierto que en los foros sobre series se hablaba de decepción absoluta. Pero en las distintas convenciones (Comic-cons) que se organizan cada dos por tres en los Estados Unidos de América, Whedon y Dushku ( protagonista absoluta de la serie y productora ejecutiva) anunciaban a los fans: "Esperaos al capítulo 6, que va a ser acojonante". Me recuerda mucho a lo que sucedió con Fringe ( de la que hablaremos más adelante). Y el capítulo 6 llegó, y evidentemente todo cambió. Se fueron dejando a un lado los rollos procedimentales y Dollhouse ahundó en su propia mitología, hasta llegar al clímax final.
Bien, todo esto es la teoría. Si me preguntáis por mi opinión os diré, pequeños saltamontes, que ni los cinco primeros episodios son tan horribles, ni el resto de la serie es tan buena. Todo en general está un poco forzado. Whedon, que en Buffy Cazavampiros tejía unos guiones autoparódicos bastante hilarantes, se pone aquí serio y no podemos terminar de creerle. Las actuaciones ( en plena época dorada de la ficción televisiva) no dan la talla, y algunas frases me hicieron darle a la barra espaciadora para parar un segundo y tomar el aire ( "Nadie debería ser esclavo de nadie. Sobre todo ahora, que tenemos un presidente negro" WTF?). Otro problema que tiene Dollhouse son sus personajes. Sabemos que Whedon y Eliza Dushku se llevan muy bien, y que ella ha invertido dinero en el producto, pero ¿tiene que ser el personaje de Echo una muestra continua de las aptitudes de Dushku? Su presencia en pantalla es excesiva ( vale, sí, es la protagonista, pero hay momentos de sobreexposición descarada). Además hay un problema más importante con respecto a los personajes. La propia temática de la serie ( recordemos, personas a las que se les ha borrado la mente para implantarles nuevas personalidades) hace que en cada capítulo conozcamos a personajes nuevos dentro de la piel de los mismos actores, con lo que resulta realmente difícil empatizar con ellos. Si bien es cierto, que Echo es lo suficientemente atractiva ( y no sólo físicamente) como para conectar con ella. Dejaremos al márgen las cuestiones morales que plantea la serie y las posibles segundas lecturas que pueda llevar el discurso ideológico de la serie ( ¿podemos relacionarlo con las células madre?), porque sí entramos en estas cuestiones no sé qué concepción tendría de la serie.
Después de todo esto pensaréis: ¿pero te gustó o no te gustó? Pues la verdad es que sí. Es bastante entretenida y hay algo de sequía en cuanto a ciencia ficción den la televisión ( al menos esta pasada temporada). Hay momentos bastante emocionantes y giros de guión inexperados. Hacia el final de la temporada (los dos últimos episodios) la serie se vuelve realmente impactante y desencadena en un capítulo magistral, digno de Emmy, que curiosamente no se emitió en televisión. Sí. Dentro de esa maldición que le cayó a Dollhouse con Fox encontramos una de las mayores estupideces de progamación qué he escuchado en tiempo. Resulta que por culpa de sus bajos índices de audiencia, se esperaba que Dollhouse no fuera renovada para una segunda temporada. De hecho los seguidores continuaban viendo la serie sabiendo que no habría más Dollhouse el año siguiente. Era una resignación. Pero, para sorpresa de todos, y a un capítulo de la season finale, Fox anunció que Dollhouse volvería el año que viene. Todos flipando. Al parecer Fox no era tan malo cómo decían. Pero entonces llegó la hecatombe. Resulta que la primera temporada de Dollhouse está compuesta por 13 episodios, pero, debido a ese piloto que nunca se emitió y que fue sustituido por ese mal comienzo del que hablábamos antes, Fox sólo contrató 12 episodios. Y pensaréis, "Qué tontería, ¿no?. Pues no, señores. Fox se negó a emitir el capítulo 13, a pesar de que todos apuntaban a que era el mejor de toda la temporada y que, hablando de negocios, había comprado la continuación de la serie. Totalmente inexplicable.
Epitaph One, como se titula este episodio especial, aparecerá junto a los dvds de la serie, y se filtró durante la ComicCon de San Diego. El capítulo es maravilloso. Un flashforward que muestra el futuro de la organización ( y del mundo) con una maestría de guión y de técnica que no está tan presente en el resto de la temporada.
Escena de Epitaph OnePor tanto: ¿Merece la pena ver Dollhouse? Sí. Si no tienes nada más que ver y te apetece pasar un rato entretenido. Cuesta entrar en la dinámica al principio pero una vez dentro es bastante divertida.
Y, ¿qué podemos esperar de la segunda temporada de Dollhouse? No sabemos si continuará desde el presente actual (?) o en el futuro, pero sí esperamos que el Epitaph One marque la calidad de los capítulos de la segunda temporada. Si es así ( cosa que, personalmente, dudo) tendremos que hablar de palabras mayores, y considerar a Dollhouse como serie de culto que, todavía, no es.
Puntuación SerieZetaCP: 6/10
pd- Los Opening Credits son uno de los más cutres que he visto en mucho, mucho tiempo.
http://www.youtube.com/watch?v=shocYpbz9hQ ( No es posible incrustarlo)